Mueren ahogados en Río Bravo bebé y su padre originarios de El Salvador
Un hombre de nacionalidad salvadoreña y su hija (de un año con 11 meses de edad), murieron ahogados en el Río Bravo al intentar cruzar la frontera hacia Estados Unidos.
Valeria Martínez no había cumplido ni dos años. Murió junto con su papá, Alberto Martínez Ramírez, de 25 años, al tratar de cruzar el río Bravo, a un kilómetro del puente internacional de Matamoros.
El hecho se suscitó cuando la menor de un año con 11 meses fue arrastrada por la corriente. El padre de la niña trató de rescatarla, pero no pudo lograrlo. La esposa del migrante ahogado, Tania Vannesa, logró salvar su vida al ser auxiliada por otra persona.
Habían llegado a esta ciudad para pedir asilo político en Estados Unidos. Sin embargo, ante la desesperación por la lentitud en los trámites decidieron junto con otros migrantes cruzar el río Bravo, según señaló Tania Vanessa. Ayer, fueron encontrados los cuerpos de su esposo y su hija.
Ellos son dos de los seis migrantes que murieron en las últimas horas ante el cerco de 25 mil 500 elementos de la Guardia Nacional desplegados en los principales accesos de internación al país, que los obliga a buscar nuevas rutas.
Otros cuatro, de origen guatemalteco, fallecieron por insolación y deshidratación también en la frontera norte.
En este contexto, el gobierno de México detalló que se han creado tres diques para parar la migración ilegal. Uno en la frontera con Guatemala, otro en el Istmo de Tehuantepec y otro más en la frontera con Estados Unidos. Para ello se han desplegado a 25 mil 500 elementos en el país.
El secretario de Defensa Nacional (Sedena), Cresencio Sandoval González, detalló la estrategia de contención en las tres principales rutas de internación, en la costa, centro y Golfo. Entre la frontera sur y el Istmo de Tehuantepec hay 10 mil 500 elementos de las Fuerzas Armadas destinados a esas tareas. Y otros 15 mil integrantes de la Guardia Nacional y el Ejército en la frontera norte del país.
En principio, el acuerdo con la Casa Blanca implicaba el despliegue de seis mil elementos en la frontera con Guatemala. Además, hay 19 embarcaciones para vigilar rutas marítimas y fluviales en el Golfo, el Caribe y el Pacífico.