El Panteón de Dolores, 109 años albergando los restos de chihuahuenses
Chihuahua.- El Panteón de Dolores, fue nombrado así a partir de la década de 1930, pues antes era el Panteón Nacional y la gente lo confundía con el Panteón Municipal, por lo que se decidió cambiarle el nombre.
A pesar de abrir sus puertas en 1912 resguarda restos y tumbas aún más antiguas que fueron expropiados y reubicados de sitios que fueron panteones antiguos como por ejemplo el Parque Revolución que, era el panteón de la Regla a mediados del siglo XIX, además de otro panteón, en lo que hoy es la calle Simón Bolívar.
Entre los personajes que descansan en el cementerio son: general Rodolfo Fierro “El carnicero”, mano derecha de Francisco Villa y que murió ahogado en la laguna de Nuevo Casas Grandes y traído para ser enterrado en el de Dolores.
El exgobernador Miguel Ahumada, Miguel Trillo secretario personal de Pancho Villa y que muriera junto con el Centauro en la ejecución de Parral. Los hermanos Navarro, que trajeron la medicina militar a Chihuahua.
Doña Luz Corral de Villa, última esposa del general de División. Pascual Orozco, los gobernadores Óscar Ornelas y su esposa Leonor; Oscar Flores; el maestros José Fuentes Mares, el padre Maldonado, donde ya no se encuentra su cuerpo pero sigue siendo la tumba más visitada.
La familia Terrazas, los Vallina, los Stegue, Don Manuel Chávez que fuera gobernador en la mitad del siglo pasado. El general Rodrigo M. Quevedo.
Una de las tumbas más antiguas es de Antonia Parra de Prieto, ella falleció el 3 de agosto de 1866; así mismo la de Espiridión Arzaga, la cual es una tumba sencilla que consta de una columna de cantera labrada que remata con unas flores.
Las tumbas más buscadas
También en este panteón descansaron, hasta que se canonizo y sus restos terminaron en la Catedral de Chihuahua, los restos mortales de San Pedro de Jesús Maldonado, quien falleció el 11 de febrero de 1937, su tumba es una de las más visitadas. Hasta ese lugar llegan los feligreses católicos y devotos a visitar la tumba del que fue mártir y ahora declarado santo. En su tumba se pueden apreciar oraciones, cartas y pensamientos de agradecimiento. De la misma manea flores naturales y artificiales. Las fotos y objetos personales no pueden faltar, así como libros y placas de granito como muestra de agradecimiento por los favores recibidos.
La tumba, de Rodolfo Fierro, también es muy buscada y visitada, fallecido un 13 de octubre del 1915. Dicho personaje destaca por su sangrienta manera de asesinar a sus contrincantes tanto en la revolución como en otros tiempos, nacido en un pueblo llamado Charay, en El Fuerte, Sinaloa y se unió a las fuerzas villistas en 1913. Participó en las batallas de Tierra Blanca, en la toma de Chihuahua, Ojinaga, Torreón, Zacatecas que provocaron la caída de Victoriano Huerta y junto a Villa y Zapata entró triunfal a la Ciudad de México.
Otra tumba muy popular es la de la esposa de Doroteo Arango mejor conocido como Pancho Villa, doña Luz Corral, quien vivió con el general durante mucho tiempo, y quien a los 30 años enviudó, resguardándose en su casa, hoy un museo, ubicado en la calle 10° y Méndez.
Luz Corral vivió en la casa hasta su lecho de muerte, permaneciendo como la viuda de Villa por 58 años, cabe mencionar que la casa actualmente pertenece al Gobierno del Estado pues fue donado por la viuda de Pancho Villa antes de fallecer.
Ubicado en la colonia San Jorge, el Panteón de Dolores, contiene los restos personajes que hicieron historia, tanto en el aspecto, político, intelectual, empresarial, social, militar y religioso, como ya mencionamos líneas atrás.
El camposanto fue abierto en 1912, cuando a iniciativa de don José Rodríguez abrió este lugar para “guardar” los restos de los fallecidos, apoyado de su esposa. Luego, el manejo pasó a manos de sus hijos y ahora de los bisnietos.
Este camposanto, además, es una verdadera muestra del arte funerario, pues cuenta con un universo diverso de tumbas, mausoleos, estatuas y lapidas, en el que se pueden encontrar ángeles, santos y personajes bíblicos bellamente esculpidos.