Los peligros que supone la extrema derecha para la democracia

Por: Ana Lilia Dueñas

Periodista 

La extrema derecha es peligrosísima para la democracia, porque lleva consigo un discurso de estigmatización del contrario; de diferenciar entre puros e impuros: entre los que comulgan con su ideología y los que no; esta estigmatización está atravesada por tres ideas fundamentales que son: Dios, patria y familia, y cuando esto se mezcla con el discurso político, se convierte en una guerra religiosa, y esto es lo contrario a democracia, que supone la convivencia y el respeto a la pluralidad de opiniones y justamente esta extrema derecha ve a la política como una guerra de amigos y enemigos y eso es contrario a la convivencia democrática.

El problema no es solo el líder de extrema derecha actual, si no quienes lo ayudan, lo asisten, lo rodean, buscando un beneficio de este crecimiento, hay muchos políticos tradicionales que se han radicalizado a la derecha sólo para sacar votos, ya que tal vez no compartan en realidad esa filosofía, pero lo dicen y lo repiten porque ven que les conviene y ese oportunismo es muy problemático.

Diferencia entre extrema derecha y la derecha tradicional: A pesar de que sus discursos se asemejan, la diferencia está en las apreciaciones del pasado que tienen los políticos y candidatos de extrema derecha que defienden a los regímenes y dictaduras, y aseguran que es la brutalidad del mercado lo que resolverá los problemas que tiene la sociedad, que es un discurso que conviene a muchos empresarios.

Esto paso ya en Brasil, y por ello asusta este proceso de naturalización de la extrema derecha, y esos mismos empresarios que apoyaron en 2018 a Jair Bolsonaro, vieron todos los desastres que este realizo en Brasil durante la pandemia, o el tema de la libre portación de armas, ese tipo de agendas no es normal en Latinoamérica, y en Argentina ahora, otro político de extrema derecha, lo está impulsando: Javier Milei.

Uruguay cuenta con un sistema democrático estable, Julio María Sanguinetti, estaba orgulloso de haber logrado que Cabildo Abierto (fundado en 2019), un partido de extrema derecha, estuviera en la coalición de gobierno, y así aceptará los valores de la democracia. Y es que este partido, es minoritario y por este mismo carácter, se ve obligado a hacerse de compromisos y no puede tener un discurso extremista como Milei o Bolsonaro. El ejemplo uruguayo, es pues, interesante, en como las instituciones tienen que funcionar dando estabilidad económica y política a un país, para que no irrumpan este tipo de fuerzas (la derecha extrema).

Y aquí vale la pena hacer la reflexión, si la izquierda tiene que replantearse que se está haciendo mal, pues la extrema derecha está creciendo, y mucho, y faltan respuestas desde los espacios políticos y lugares de pensamiento para esa irrupción en la izquierda.

Del partido político español, Vox, de ideología ultraconservadora y ultranacionalista y su influencia en Latinoamérica, hablaremos en otra ocasión.